Aprovechando la visita a Chile del canciller alemán, Olaf Scholz, ambos países ratificaron la alianza que abre la puerta a la innovación tecnológica, instancias de investigación y desarrollo, además de acuerdos público-privados para fomentar una industria cada vez más verde.
Tras una década de trabajo conjunto, Chile y Alemania renovaron su agenda común en minería, materias primas y economía circular, gracias a un acuerdo de cooperación firmado a principios de año entre el Ministerio de Minería de Chile y el Ministerio Federal de Economía y Protección del Clima de Alemania (BMWK). La alianza se oficializó durante la gira al país del canciller alemán Olaf Scholz y reemplazó el memorando existente en la materia, ampliando así los impactos positivos para ambos estados. Pero, ¿qué alcances tiene?
Uno de los resultados que destacó el canciller Scholz por estos 10 años de trabajo fue la ejecución de acciones para alcanzar los objetivos climáticos y de transformación minera de ambos países, aunque no se quedó allí: también subrayó la generación de valor local que fomenta este acuerdo.
«En la competencia global del siglo XXI, no basta con transportar materias primas, sin tener en cuenta el medio ambiente, sin condiciones laborales razonables, sin la creación de valor añadido a nivel local», enfatizó Scholz en Santiago.
Con el acuerdo, además, se recalcó la importancia de una iniciativa de trabajo binacional sobre la materia: el Foro Chileno-Alemán de Minería y Recursos Minerales. En esta instancia, el rol de la Cámara Chileno-Alemana (AHK Chile) es clave, pues coordina el evento cada año, alternando el suelo anfitrión entre tierras germanas y chilenas. Asimismo, se concede un lugar especial a la cooperación en materia de minerales críticos y cuestiones medioambientales para la minería del siglo XXI.
Sobre esta materia, Peter Adrian, presidente de las Cámaras Alemanas de Comercio e Industria (DIHK), declaró que «América Latina es rica en materias primas, democrática y también tiene un gran potencial para la inversión en tecnologías sostenibles. Chile, miembro de la OCDE, no es una excepción: debido a la disponibilidad ilimitada de sol y viento, el país es un socio estratégico nato para la producción de hidrógeno verde y sus derivados. El litio y el cobre son materias primas importantes que necesitamos en Alemania. Esto también hace que el país sea interesante como socio para la producción de materias primas especialmente sostenibles utilizando las tecnologías y los conocimientos técnicos alemanes en estos ámbitos», subrayó Adrian.
Trabajo colaborativo público-privado
El acuerdo también motivó nuevas alianzas. Y ese fue el caso de la estatal chilena Codelco y la empresa alemana Aurubis: ambos firmaron un memorando para impulsar una cadena de valor del cobre más sostenible y responsable.
Al respecto, Roland Harings, CEO de Aurubis, reconoció la cadena de valor conjunto del cobre para alcanzar objetivos climáticos y sustentables en el mundo. “Ésta es la única forma en que podemos garantizar que los metales se produzcan de una manera verdaderamente responsable. Aurubis promueve ambiciosa y resueltamente el sello Copper Mark. Seguimos el enfoque de mejora continua con nuestros socios comerciales y, por lo tanto, estoy profundamente convencido de que nuestra futura cooperación con Codelco tiene el potencial de hacer una inmensa contribución al avance de la sostenibilidad de la cadena de suministro», añadió.
A su vez, el presidente de Codelco, Máximo Pacheco, destacó el desafío que implica “una coexistencia amigable con nuestras comunidades y habilitar la transición hacia energías renovables, la electrificación y la electromovilidad. Nuestro compromiso no es sólo con el desarrollo de Chile, sino que con el mundo entero, por lo que la concreción de iniciativas como ésta contribuyen de manera virtuosa con nuestros objetivos”.
Y eso no es todo. Otro memorándum de entendimiento que se firmó en la ocasión fue aquel que incluyó al Ministerio Federal de Economía y Protección del Clima de Alemania y Corfo para la promoción de proyectos transfronterizos de investigación, desarrollo e innovación para PYMES chilenas y alemanas. Franziska Brantner, Secretaria de Estado Parlamentaria del BMWK, explicó que «los proyectos conjuntos ofrecen a las pequeñas y medianas empresas la oportunidad de reforzar su productividad, competitividad e internacionalización. También pueden beneficiarse de un elevado efecto de aprendizaje y aumentar su capacidad de globalización. La primera convocatoria conjunta de propuestas se publicará en breve».
De esta manera, el trabajo colaborativo entre ambas naciones comienza un nuevo ciclo de fortalecimiento, que sin duda dará que hablar en el contexto de Expomin, a desarrollarse del 24 al 27 de abril en Santiago. Esta feria minera de renombre mundial justamente pone en el centro las tecnologías de vanguardia, soluciones energéticas, y modelos de economía circular. Un total de 42 expositores germanos estarán presentes en el Pabellón Alemania, además de una veintena de empresas afiliadas a la Cámara Alemana, que dispondrán de sus propios stands.