Miles de personas visitaron los puntos de hidratación de la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Sanitarios (Andess), quienes destacaron que el agua potable en Chile es segura.
Ahora el gremio se prepara para entregar agua potable en los Juegos Parapanamericanos 2023, y brindar información a los visitantes chilenos e internacionales sobre las bondades de este recurso vital.
Un positivo balance realizó la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Sanitarios (Andess) en el marco de su participación de los Juegos Panamericanos 2023. Bajo el lema “Hidrátate con confianza”, el gremio estuvo entregando agua potable a los visitantes nacionales e internacionales durante todo el transcurso de las actividades deportivas, junto con brindarles información sobre las bondades de este recurso vital.
“Estamos orgullosos de haber participado en los Juegos Panamericanos 2023 con diversos puntos de hidratación y de haber llevado agua de la llave a las sedes donde más se necesitaba, para que todos los visitantes, tanto nacionales como internacionales, pudiesen disfrutar de las jornadas deportivas. Estamos contentos con el recibimiento del público, quienes visitaron de manera masiva nuestros stands, y quienes destacaron que el agua potable en nuestro país es segura”, señaló Lorena Schmitt, presidenta ejecutiva de Andess.
Parque Bicentenario de Cerrillos, Parque Peñalolén, Prince of Wales Country Club en la comuna de la Reina, Laguna Los Morros en San Bernardo y el Polígono de Tiro en Pudahuel fueron los lugares escogidos donde se entregó agua potable, y donde se desarrollaron importantes competencias como Béisbol, Vóleibol Playa, BMX Racing, Tiro, Escalda Deportiva, Esquí Acuático, entre otros.
En esta nueva etapa, Andess se prepara para repetir la experiencia en los Juegos Parapanamericanos 2023, que se extenderán desde el viernes 17 hasta domingo 26 de noviembre.
Es importante recordar que Chile se encuentra dentro de los 40 países del mundo donde es seguro beber agua de la llave. La categoría agua potable y saneamiento del Índice de Desempeño Ambiental (EPI, su sigla en inglés) de la Universidad de Yale, mide el nivel de protección de un país a la salud humana de riesgos ambientales usando dos indicadores: agua para consumo insegura y saneamiento inseguro. Chile se encuentra en el lugar 38 de 180 países en esta categoría.
El sector ha destinado cerca de US$ 9.000 millones a infraestructura sanitaria y tecnología desde el año 2000, cuando se instauró el modelo de colaboración público-privada que profundizó el logro alcanzado por el Estado de ofrecer agua de la llave segura y potable para todos los habitantes urbanos y permitió avanzar decididamente en saneamiento.
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