En marzo se da inicio al proyecto POLARIN, el cual es una red compuesta por cincuenta instituciones asociadas que ofrecerá acceso a infraestructuras de investigación polar. El proyecto obtuvo financiamiento de la Unión Europea a través del Programa Marco Horizonte Europa, adjudicándose un total de 14,6 millones de euros a ser ejecutados durante los próximos cinco años. POLARIN promueve la investigación interdisciplinaria para abordar los desafíos científicos en ambas regiones polares.
Las regiones polares desempeñan un rol fundamental en el planeta y tienen un impacto crucial en el clima global. Para comprender y anticipar los procesos complejos que ocurren en estas regiones y para ofrecer información precisa basada en los datos, la comunidad científica internacional requiere tener acceso a infraestructuras de investigación de primer nivel capaces de operar en estos entornos extremos.
El proyecto POLARIN (Red de Infraestructuras de Investigación Polar), permitirá proporcionar acceso a 64 infraestructuras de investigación polar, al mismo tiempo que promoverá la investigación interdisciplinaria dirigida a abordar los desafíos científicos, tanto en el Ártico como en Antártica.
Para llevar a cabo este ambicioso proyecto liderado por el Instituto Alfred Wegener, Centro Helmholtz de Investigación Polar y Marina (AWI) de Alemania, se ha creado una red de cincuenta institutos y centros de investigación asociados, tanto en Europa como en otros lugares del mundo, incluyendo países como Canadá, Estados Unidos, Ucrania y Chile, a través del Instituto Antártico Chileno (INACH).
Este proyecto es único en su tipo y será clave para fortalecer la investigación. Al integrar estas infraestructuras, se mejorarán las capacidades de observación y modelamiento para enfrentar los desafíos planteados por las transformaciones polares y su impacto planetario.
«Lo que distingue a POLARIN es que, por primera vez, ofreceremos acceso a infraestructuras de investigación tanto en el Ártico como en la Antártica a través de un proyecto único», explica la Dra. Nicole Biebow, coordinadora de este proyecto y encargada de la Unidad de Cooperación Internacional del Instituto Alfred Wegener. «Hemos creado una red de infraestructuras de investigación interdisciplinar que abarca todos los ámbitos de investigación relacionados, desde la investigación marina y terrestre hasta la atmosférica. El planteamiento es innovador y único. Es el único proyecto en su clase», destaca.
Tal como se mencionó, POLARIN brindará acceso internacional a 64 infraestructuras de investigación polar, incluyendo bases científicas que se encuentran en el Ártico y en Antártica, buques científicos y rompehielos, observatorios en tierra y mar, infraestructuras de datos y depósitos de testigos de hielo y sedimentos. Además, ofrecerá acceso remoto a las infraestructuras, lo que significa que los investigadores podrán solicitar muestras, conjuntos de datos y otros recursos, que se recogerán y prepararán en la infraestructura correspondiente sin necesidad de que el solicitante se encuentre in situ.
Además, mejorará los servicios en línea, el acceso a los datos y la interoperabilidad entre los sistemas. Asimismo, se asegurará de que las generaciones futuras reciban formación sobre el uso de infraestructuras de investigación de vanguardia. Esta formación incluirá seminarios sobre planificación del trabajo de campo, uso sostenible de las infraestructuras de investigación y equipos tecnológicos, así como la recopilación y tratamiento de datos. También se ofrecerá formación especial sobre seguridad en las regiones polares.
Una oportunidad única para Chile
Según el Director Nacional (S) del INACH, Andrés López este proyecto representa una oportunidad única para contribuir al avance del conocimiento científico en las regiones polares, particularmente en la Antártica. Además, la institución fue invitada especialmente a participar de esta iniciativa, siendo la única de Sudamérica en colaborar en ella.
Enfatiza que esta colaboración internacional permitirá a Chile acceder a infraestructuras de vanguardia, ampliando significativamente las capacidades científicas del país en las regiones polares. Además, resalta que “esta iniciativa fomentará la cooperación interdisciplinaria entre investigadores de diferentes países, lo que facilitará abordar los desafíos científicos más relevantes en ambos polos”.
Considera que la participación en el proyecto POLARIN representa una oportunidad estratégica para Chile de consolidarse como un actor relevante en la investigación polar a nivel mundial y de contribuir activamente al avance científico y la protección del medio ambiente antártico.