La celebración de la Pascua invita a reflexionar sobre su sentido espiritual y también a adoptar decisiones saludables. El académico UCSC, Rodrigo Buhring, entrega recomendaciones para consumir huevitos de chocolate con moderación y mantener una alimentación equilibrada.
La Pascua es, para el mundo cristiano, una fecha de profunda importancia espiritual que conmemora la resurrección de Jesús. Sin embargo, también es una celebración que se ha instalado en la vida familiar a través de tradiciones como la entrega de huevitos de chocolate a niños y niñas. El desafío: equilibrar esta costumbre con una alimentación saludable.
Rodrigo Buhring, académico de la carrera de Nutrición y Dietética y Director de Escuela de Pregrado de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), explicó que estos productos suelen tener un alto contenido de calorías, grasas saturadas y azúcares. “Un huevo de chocolate de 5g aporta en promedio 30 calorías y 3 g de azúcar. El consumo de 4 a 5 huevos de chocolate entrega en promedio 10 g de azúcar refinada, lo que está levemente por sobre el máximo recomendado de consumo diario de este tipo de azúcar en niños”, indicó.

Sobre las alternativas disponibles en el mercado, el nutricionista recomienda optar por chocolates con más del 60% de cacao, ya que aportan antioxidantes y beneficios cardiovasculares. “También existen opciones sin azúcar añadida o endulzadas con edulcorantes no calóricos, que pueden ser una mejor alternativa, aunque igualmente requieren moderación”, añadió.
En cuanto al consumo durante estas fechas, Buhring entrega consejos prácticos: “Preferir chocolates huecos, sin relleno, revisar el etiquetado nutricional y elegir productos con menor cantidad de sellos. Además, es recomendable que los niños consuman estos productos durante la primera mitad del día para favorecer el gasto de energía”. El académico agregó que es importante mantener una rutina de alimentación con frutas, verduras y abundante agua, sin reemplazar comidas principales por golosinas.
Más allá de la tradición de regalar huevitos de chocolate, la Pascua de Resurrección es una de las celebraciones más importantes para el mundo cristiano, ya que conmemora la victoria de Jesucristo sobre la muerte y la esperanza de una vida nueva. Es una invitación a vivir con alegría, a renovar la fe y a compartir en familia, reconociendo el profundo sentido espiritual de esta fecha. Por ello, para el académico de la UCSC esta también es una oportunidad para cultivar el cuidado y el amor hacia los demás en cada gesto, incluso al momento de elegir y compartir alimentos.
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