Hasta el miércoles 30 de junio estarán abiertas las postulaciones para el Premio Avonni que, este año y bajo el lema “Innovando por la Sostenibilidad”, busca destacar distinguir innovaciones, empresas e iniciativas comprometidas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y las metas planteadas en la Agenda 2030 de la ONU, especialmente a aquellas con alta participación femenina, que surgen desde regiones y las que tiene base científico-tecnológica, entre sus principales características.
En la Universidad de Concepción, UdeC, es la Plataforma de Negocios Incuba UdeC (IU) la entidad encargada de dar a conocer los detalles de este concurso y colaborar a aclarar las dudas que puedan surgir en torno a las postulaciones. Su principal canal de contacto es el correo electrónico incuba@udec.cl. “Avonii es un premio en que es muy importante poder estar presente y poder mostrar lo que la comunidad Incuba UdeC está realizando en términos de innovación”, explica la directora ejecutiva de IU, Beatriz Millán Jara.
“El premio”, detalla Millán, “busca visibilizar casos de éxito que están creando valor mediante la innovación, en diversas categorías en que pueden ser reconocidos nuestros emprendedores. Es el premio más importante a nivel nacional en términos de visibilidad, lo que nos permite articular eventuales alianzas y potenciar nuestros emprendedores e incentivar a que más personas se sumen al camino de emprender y que puedan ser un ejemplo para otros emprendedores y futuras generaciones”.
“La clave, además”, agrega la directiva, “es la sostenibilidad que es lo que se busca y estos proyectos innovadores está generando un impacto social, en la comunidad, que es un elemento muy relevante”, afirma.
El positivo impacto en el ambiente y el gran potencial de aporte nutricional que tienen las moscas, fueron los factores que llevaron a Cristian Emhart García a crear Food For The Future (F4F) en 2013, empresa que recientemente ha terminado una productiva ronda de negocios para el levantamiento de capitales, por USD $4.5 millones, que les permitirán impulsar un crecimiento de las operaciones de su planta ubicada en Puerto Montt.
La firma -que ganó el Premio Avonni en 2018 y forma parte de la Comunidad IU en calidad de egresados- está dedicada a la producción de alimentos sustentables a partir de harina elaborada a base de moscas soldado negro o Hermetia illucens y entre sus principales clientes están la industria salmonera del país y fabricantes de pellets para mascotas, y los desafíos para la nueva etapa involucran una expansión a otros sectores como la producción de cosméticos, entre otros, con un fuerte impulso en I+D.
“Reconocimientos como el Avonni son muy relevantes para el ánimo propio como emprendedor, porque este tipo de premios entregan energía extra, sobre todo viniendo de entidades tan importantes como éste”, explica Emhart. “Y, además, te valida, valida tu modelo frente a terceros, que pueden ser potenciales inversionistas o clientes, que están buscan temas más de innovación. Es un sello que te puede ayudar en alguna negociación que se esté dando, tanto con inversionistas como con clientes”.
Sobre la reciente ronda de negocios, Emhart explica que “nos va a permitir escalar en forma importante, hasta niveles que nos ayuden a llegar a precios y costos más competitivos de nuestros ingredientes frente a otros más tradicionales. Entonces, hay un escalamiento productivo y comercial importante para los próximos meses”.
Emhart, explicó que “tener buenas ideas es algo importante pero no suficiente cuando quieres emprender, uno de los desafíos claves es hacer cosas nuevas y agregar valor, con mucha perseverancia, inteligencia y rodeados de gente que te apoya incondicionalmente en esta etapa temprana de tu negocio, que creen en ti y en lo que estás haciendo”.
“La ejecución es la clave, con un gran equipo. No puedes pensar en ser un ‘jinete solitario’. Tienes que armar equipos comprometidos y con talento, lo que te va a llevar al éxito, junto con las redes que vas armando y la gente que te va apoyando en este camino. El financiamiento cuesta al inicio, pero considero que hoy el apoyo a nivel de Corfo u otras instituciones, permiten pasar a un siguiente nivel. Si miramos fuera de Chile, este tipo de fondos semilla no existen, acá, te apoyan desde que tienes una idea con un prototipo inicial de algo. Si lo que haces es innovador, diferente y agrega valor, los recursos llegan igual”, afirma el líder de F4F.
Al respecto, el Director de Desarrollo e Innovación de la UdeC, Dr. Pablo Catalán Martínez, afirmó que “Extendemos la invitación a todos los emprendedores y emprendedoras de nuestro ecosistema de innovación y emprendimiento a postular al premio Avonni”.
El directivo explica que este reconocimiento “ha constituido durante los últimos años un sello distintivo para aquellos emprendimientos no sólo exitosos desde el punto de vista financiero, sino que también con características de impacto social y en función de la representación de las mujeres en emprendimiento y, por cierto, en lo que se relaciona con su base científico tecnológica. Ello puede abrir nuevos caminos y oportunidades para aquellos emprendimientos que tengan una visión de futuro de mayor alcance y sinérgica en un mayor número de aristas”.
Red de embajadoras
Hace algunas semanas, Avonni creó su Red de Embajadoras como una forma de promover el talento femenino y la participación de más mujeres. Su misión es inspirar y empoderar a emprendedoras para que se atrevan a innovar sin importar barreras territoriales o de contacto, con el objetivo de superar el 33% de participantes de sexo femenino que tuvo la versión 2020 de este consolidado premio, organizado por Ministerio de Ciencia, ForoInnovación, TVN y El Mercurio y que ya cumple 15 años.
Entre las participantes de la Red de Embajadoras, hay cinco seremis de Ciencia, además de representantes de diversos rubros como Mai Nie Chang de Hay Mujeres, Pamela Chávez de Domolif y, recientemente, se ha sumado, representando a la zona Sur del país, la emprendedora penquista María Loreto Ormeño Saavedra, líder de Wellness Technologies, empresa productora del primer probiótico fabricado en Chile, obtenido en el marco de una investigación UdeC y que, recientemente, comenzó la exportación de su línea de suplementos alimenticios a mercados de Asia, Europa y Centroamérica, tras un extenso periodo de acompañamiento por parte de IU y la Oficina de Transferencia y Licenciamiento, OTL, de la UdeC.
“La nominación fuera una grata sorpresa para mí, ya que he sido una emprendedora atípica en el sentido de que partí en una edad bastante mayor que la mayoría, con el objetivo de tener un emprendimiento que me permitiera una jubilación digna, y que fuera un emprendimiento con un impacto social y un desafío intelectual permanente”, detalla María Loreto. “Es importante representar en buena forma este desafío, ya que es un reconocimiento honorífico de la mayor visibilidad que existe en el país y significa que cumplo con los estándares de representatividad que el premio exige”.
“Desde mi propia experiencia como emprendedora”, detalla María Loreto, “creo que los principales aspectos en los que se requiere orientación en las etapas tempranas del emprendimiento tienen que ver con definir el objetivo, lo que se quiere lograr, cuál es el propósito que hay detrás del producto o servicio y, en base a eso, empezar a desarrollar las capacidades que nos van a permitir lograr el objetivo, buscando apoyo y vinculándonos con el todo el ecosistema de emprendimiento que hoy está disponible, que es un privilegio para todos los que están partiendo, y acercarse a Corfo que hoy está mucho más activo y actualizado con las reales necesidades que tienen los emprendedores para poder desarrollar sus innovaciones”.
Finalmente, María Loreto enfatiza que “para nosotros como Wellness Technologies, es un tremendo orgullo ser embajadores de Avonni y es muy motivador para nuestro equipo porque significa que estamos caminando por una senda que no sólo está orientada a generar ingresos, sino que también nos permite apoyar a que otros también tengan éxito”, afirmó.
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