Por: Thierry de Saint Pierre, presidente de ACTI.
Desde ACTI, el principal referente de la industria tecnológica de nuestro país, aprovechamos esta celebración del Día Mundial de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información, para reiterar la importancia de las TIC, sobre todo en este tiempo de pandemia y confinamiento. Son las TIC y el uso del internet lo que ha permitido seguir adelante con el funcionamiento de la sociedad en general, gobiernos, empresas y con una economía cada vez más digital y globalizada. Y hay que mencionar que -más que nunca- debemos ser conscientes de la necesidad de acortar la brecha digital.
Según un informe de la Subtel, de octubre del 2020, nuestro país tiene 3,6 millones de conexiones de Internet fijo (a junio de 2020); cifra representa un crecimiento de 5,5% con respecto a los 3,4 millones registrados al primer semestre del ejercicio pasado. Tenemos también que los accesos de banda ancha fija tuvieron un crecimiento de 2,9%. Así, de tener 3,5 millones de conexiones a marzo de 2020, se pasó a 3,6 millones de conexiones a junio de 2020.
En tanto, también el informe arroja que hubo un tráfico total de Internet fija de 6,6 millones de Terabytes (TB), entre enero y junio de 2020; y que todos esos incrementos se deben a la crisis sanitaria, las cuarentenas, al hecho que se instaló el teletrabajo y también las clases on line.
Además, tenemos que, según el último informe sectorial de la Subsecretaría de Telecomunicaciones, se registró un tráfico total de Internet fija de 10,7 millones de Terabytes (TB), entre los meses de enero a septiembre de 2020. Esas cifras significan un crecimiento de un 57% en comparación con el mismo periodo del 2019.
En tanto, Chile ya cuenta con 1.244 Zonas WiFi, puntos de acceso públicos y gratuitos a Internet. Hace solo unos días, la Subtel anunció la adjudicación de otros 398 puntos contemplados en una segunda etapa. Así el proyecto “WiFi 2.0” ya contempla 508 zonas más, las que se agregan a las 1.244 que mencionamos. Con estas medidas se logra acortar la brecha digital y se democratiza el acceso a internet.
Y otra buena noticia es la Fibra Óptica Austral (FOA), que son 2.800 kilómetros de cable submarino, que entregará una mejor conectividad a regiones como Magallanes, donde el 85,8% de habitantes usa internet, según datos de Fundación País Digital.
Todo lo anterior trae mejoras a la población en general y para las empresas, lo que significa avance y desarrollo para todos, mayor equidad e igualdad de oportunidades. Es el momento en que de manera colaborativa: privados, gobierno, academia, debemos trabajar para robustecer la infraestructura digital del país.
En otra arista, la llegada del 5G potenciará la posibilidad de sensorización y recolección de datos, apuntando a todo tipo de aplicaciones para ir en este camino. Nosotros ya trabajamos para avanzar en la hoja de ruta de las “Ciudades Inteligentes”. Hace unos meses, en el 2020, lanzamos el “Plan Maestro para Ciudades Inteligentes Abiertas”, proyecto desarrollado por el Smart City Lab de la Universidad de Santiago, con el apoyo de ACTI y Corfo. Buscamos apoyar a los municipios en el proceso de transformación hacia ciudades inteligentes, para acercar a Chile cada vez más al desarrollo, pero siempre teniendo a las personas, a los ciudadanos como centro del proyecto, llevando la tecnología en forma equitativa. Pues, finalmente, son los ciudadanos quienes van a disfrutar de mejoras en la calidad de vida y de su entorno y deben poder decidir qué aspectos son prioritarios.
Entonces, pronto podremos observar mejoras en términos de seguridad, de un aumento de la sostenibilidad ambiental, una mayor fluidez en la movilidad y mejoras en la calidad de vida de los habitantes de las ciudades.
Y un tercer punto que merece toda nuestra atención, es el momento político histórico que Chile vive, con la oportunidad de rehacer la Constitución. Hoy, en esta nueva normalidad, nuestra sociedad se está educando, trabajando, cuidando su salud, reuniendo con la familia y amigos a través de internet. Por lo tanto, el tema de los deberes y derechos asociados a la tecnología y sus usos, va a ser muy probablemente parte del debate de nuestros constituyentes.
En todas estas instancias, ACTI continuará trabajando y apoyando, pues se trata de aspectos fundamentales para el desarrollo del país, para lograr un Chile más comunicado, con menos brecha digital, más equitativo y más sustentable.