Las compañías que cuenten con medios no declarados en el extranjero deberán acogerse a la Ley de Cumplimiento Tributario, normativa se implementará para que el proceso de contabilidad se efectúe de la manera correspondiente y no se comentan evasiones fiscales.
La nueva Ley de Cumplimiento Tributario, que entra en vigencia el 1 de enero de 2025, tiene como objetivo facilitar que las empresas y personas que tengan bienes o rentas no declaradas en el extranjero puedan regularizar su situación ante las autoridades fiscales. Con esto se busca una mayor transparencia, dado que las empresas se verán obligadas a adoptar las prácticas contables correspondientes.
El impacto y el proceso para acogerse a esta ley varían según la situación de cada contribuyente, como lo es en el caso de las empresas que buscan regularizar bienes o rentas no declaradas en el extranjero, con esto se pueden evitar sanciones y multas que podrían aplicarse si las autoridades encuentran irregularidades.
El académico de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), Sergio Espinoza, señaló que “para acogerse a este procedimiento los contribuyentes deben presentar una declaración voluntaria ante las autoridades fiscales, detallando todos los bienes o rentas no declaradas en el extranjero. Esto incluye cuentas bancarias, inversiones, propiedades y otros activos. Presentada la declaración, se calcula y pagan los impuestos atrasados sobre los bienes o rentas regularizados. Se debe proporcionar la documentación que pruebe la titularidad de los bienes y la existencia de las rentas”.
La nueva ley ofrece una vía para que las empresas regularicen su situación tributaria de manera ordenada. Este proceso debe contar con una planificación cuidadosa y un análisis exhaustivo de los bienes y rentas involucrados, por esta razón, Sergio Fernández, indicó que “es recomendable que las empresas consulten con expertos en derecho tributario y contabilidad antes de iniciar el proceso de regularización, para garantizar el cumplimiento de las normas y maximizar los beneficios”.
El objetivo de la nueva regulación sobre la trazabilidad de bienes es mejorar la capacidad de las autoridades fiscales para seguir el rastro de los bienes y las transacciones comerciales desde su origen hasta su destino final, de esa manera se puede tener un control más exhaustivo sobre el cumplimiento de las obligaciones tributarias y la lucha contra el fraude. Las implicaciones de esta regulación afectan a diversos actores del sistema económico, incluidas las pequeñas y medianas empresas (pymes) y los pequeños contribuyentes.
La trazabilidad de bienes implica que las transacciones de compra, venta y movimiento de bienes, deben estar debidamente registradas y ser auditables en todo momento. Esto incluye desde el suministro de materias primas hasta la venta del producto final al consumidor. Se pretende incrementar la transparencia en las cadenas de suministro, reduciendo el riesgo de operaciones no declaradas o informales que podrían evadir impuestos.
El académico, mencionó que “la nueva regulación sobre la trazabilidad de bienes puede representar un reto significativo para los pequeños y medianos contribuyentes, debido a la complejidad administrativa y a los costos involucrados. Sin embargo, también puede ofrecer oportunidades para mejorar la eficiencia, profesionalizar la gestión y acceder a nuevos mercados. Las pymes deberán ser proactivas en adaptarse a estos cambios, buscando soluciones tecnológicas y asesoría adecuada para cumplir con los nuevos requerimientos y maximizar los beneficios de operar dentro de un marco fiscal más transparente y formal”.
Es necesario reconocer la importancia de los cambios en las normas del IVA para las ventas de bienes desde el extranjero en el ámbito de la globalización y el auge del comercio electrónico, debido a que los nuevos cambios se implementan para asegurar una competencia más justa entre las empresas nacionales e internacionales, puesto que muchas veces las compañías extranjeras han tenido ventajas tributarias que desequilibran la competitividad. Los cambios en las normas del IVA buscan igualar las condiciones fiscales entre las empresas nacionales y las extranjeras.
“Con el aumento del comercio electrónico transfronterizo, especialmente en ventas minoristas, los cambios en las normas de IVA responden a la necesidad de modernizar la fiscalidad. Plataformas de comercio global como Amazon, eBay y AliExpress permitían a pequeños vendedores ofrecer bienes sin aplicar el IVA, lo que afectaba al comercio establecido. Además, las plataformas de comercio electrónico también podrían verse afectadas, ya que tendrán la responsabilidad de recaudar el IVA en nombre de los vendedores extranjeros, lo que implica un mayor control sobre las transacciones”, informó Sergio Fernández.
Dado que existe la posibilidad de que los productos que provengan del extranjero aumenten sus precios, podría suceder que las personas reconsideren la compra de artículos importados, y terminen prefiriendo los productos nacionales que ahora tendrían precios más competitivos.
“Los cambios en las normas del IVA para las ventas de bienes desde el extranjero tienen un impacto significativo tanto en la equidad fiscal como en la competitividad de las empresas nacionales frente a las extranjeras. Si bien las empresas internacionales tendrán que ajustarse a las nuevas normativas y asumir los costos adicionales del IVA, el efecto general debería ser un fortalecimiento de las empresas locales y una mayor equidad en el mercado global”, concluyó el académico.
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