Actitud positiva, dormirse temprano y hacer actividad física en la mañana pueden marcar la diferencia.
A partir del sábado 1 de abril, los relojes y dispositivos deberán retrasarse una hora, es decir, desde las 00:00 horas a las 23:00 horas, para así volver al horario de invierno, medida que busca aprovechar de mejor manera la luz del día.
Lo anterior puede, en menor o mayor medida, tener también consecuencias negativas en el rendimiento de un trabajador, dado que algunos estudios señalan que la modificación horaria puede traducirse en insomnio, cansancio, nerviosismo y alteración del apetito, entre otros efectos.
“Sin duda, pasar del horario de verano al de invierno puede significar que una persona se sienta con menos energía y ande con sueño los primeros días. Luego, la situación debiera normalizarse. No obstante, para esos días de transición es importante considerar algunos consejos con miras a que la productividad no se vea afectada”, sostiene Francisco González, gerente general de Vertical Hunter.
Algunos tips
Al respecto, el cazatalentos entregó los siguientes consejos para sortear de buena manera el futuro cambio de horario:
· Hacer actividad física en la mañana. Dado que la luz natural se apreciará desde más temprano, lo anterior es una excelente oportunidad para realizar algún deporte o actividad física con miras a relajarse y recuperar fuerzas para enfrentar un nuevo día.
· Alimentarse e hidratarse adecuadamente. Esto significa tomar un completo desayuno que incluya proteínas, fibra y lácteos con el fin de tener las energías necesarias para arrancar la jornada laboral. Asimismo, y dado que las altas temperaturas todavía están presentes en muchas ciudades del país, es importante beber suficiente líquido para enfrentar el calor.
· Dormirse temprano. Como el nuevo horario de invierno comprende levantarse una hora más temprano, es importante que la persona evite trasnochar y se duerma una hora antes para así normalizar su periodo de sueño. Ideal, además, es dejar de ver celulares y/o televisión una hora antes de dormir, al menos.
· Actitud positiva. Quizás para muchos individuos, el horario de invierno puede generar desgano, mal humor e incluso depresión. Lo importante es tener claro que nuestro organismo se adaptará sí o sí al nuevo ritmo con el pasar de los días, siendo clave en todo ello tener una mirada optimista de las cosas.
· Aprovechar el tiempo en la oficina. Una vez en el trabajo, lo esencial es que cada trabajador saque el máximo de provecho al tiempo que pasa en la oficina, organizando muy bien su trabajo y las tareas a realizar, y evitando cualquier distracción que lo hagan perder minutos valiosos.
Continúa leyendo noticias de Salud & Bienestar aquí.