En un contexto regional donde la basura es una preocupación primordial, las empresas agrupadas en la Cámara Chilena de la Construcción de Antofagasta darán un gran paso en materia de sostenibilidad y responsabilidad medioambiental. Con el anuncio de un Acuerdo de Producción Limpia (APL), la región se prepara para abordar un desafiante tema a nivel país como son los Residuos de Construcción y Demolición (RCD).
Los problemas de residuos en Antofagasta son una fuente continua de preocupación, siendo los RCD, materiales resultantes de la construcción, rehabilitación, reparación y demolición, una parte de un problema mayor. En los últimos 18 meses se estima que solo en nuestra comuna se han producido un total de 55.137 m3 de residuos de la construcción y demolición. Una mala gestión de estos puede contribuir a un contexto más amplio de contaminación del suelo y el agua.
Al reciclar y reutilizar materiales de construcción se reduce la necesidad de extraer nuevos recursos naturales. Esto ayuda a conservar los recursos limitados de la región y disminuye el impacto ambiental asociado con la extracción y producción de nuevos materiales. Tratar los RCD como recursos valiosos en lugar de desperdicios puede fomentar la economía circular. La reutilización y el reciclaje de materiales de construcción pueden generar oportunidades de empleo local en la industria de la recuperación y el reciclaje.
En respuesta a este desafío multifacético, la industria de la construcción en Antofagasta, que significa el 7,8% del empleo y el 6,6% del PIB en Chile, y la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático (ASCC) de Corfo, lideran el camino hacia una solución proactiva, mediante la firma de un Acuerdo de Producción Limpia (APL) para implementar un Estándar de Sustentabilidad para el sector de la construcción.
Este acuerdo es un compromiso voluntario entre las empresas y el Gobierno que va más allá de los requisitos legales en materia medioambiental.
“Gracias a estos acuerdos voluntarios que la Cámara está firmando en distintas regiones del país, las empresas podrán no solo podrán implementar prácticas de economía circular, también podrán a eficientar sus procesos productivos a través de la implementación de tecnologías que permitan reducir el consumo de recursos, los residuos y sus emisiones. Por esta razón, invitamos a todos los socios en Antofagasta a adherirse a este APL”, señaló Ximena Ruz, directora ejecutiva de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático de Corfo.
Los APL permiten crear una colaboración única entre el sector público y privado. Este enfoque coordinado y personalizado busca enfrentar los desafíos medioambientales específicos de la región, mejorando la competitividad y la innovación.
Beneficios y expectativas
La firma del APL en Antofagasta es una señal positiva y una parte clave de la respuesta a la problemática de la basura en la región. Resalta el compromiso de la industria de la construcción con la sostenibilidad y el bienestar comunitario. Además, los beneficios esperados se traspasan a las mismas empresas de la construcción, incluyendo la disminución de la tasa de accidentabilidad y el menor costo de transporte de residuos.
Este acuerdo tiene el potencial de transformar la gestión de residuos en la ciudad, promoviendo una cultura de responsabilidad y ofreciendo oportunidades para minimizar y valorizar todo residuo, incluyendo los RCD.
«Con este APL la industria de la construcción, un actor importante en la actividad productiva, se está haciendo responsable de sus residuos, incorporando economía circular a sus procesos, en una ciudad que está en constante crecimiento y donde es fundamental asumir un compromiso con el desarrollo sostenible y la calidad de vida de las personas», comentó Marcela Torres Moraga, presidenta Cámara Chilena de la Construcción Antofagasta.
Con el 90% de las empresas de construcción en Chile siendo micro o pequeñas empresas, este acuerdo también representa una oportunidad para que las compañías demuestren liderazgo y compromiso con la sostenibilidad, en un contexto donde la basura es una preocupación primordial.
La industria de la construcción en Antofagasta está dando un paso valiente y proactivo hacia un futuro más limpio y sostenible. La firma del APL es más que un simple acuerdo; es un pacto con la comunidad, con el medio ambiente y con las generaciones futuras.