Sentir que todo es posible mientras se espera la llegada de una nueva vida es una experiencia que la mayoría de las madres comparte. Pero, imaginar una innovadora solución constructiva basada en la comodidad del vientre materno es algo extraordinario. Esta es la historia de emprendimiento de Loretxu García, periodista de profesión, dedicada a la arquitectura bioclimática y la construcción sustentable.
Por: Hortencia Fritz A.
La inspiración para crear soluciones innovadoras puede llegar en los momentos más inesperados. Pero aquel instante en que podemos decir ¡Eureka! es solo el comienzo de una historia que no conocemos. Porque la ruta es incierta la mayoría de las veces.
Bien lo saben aquellos y aquellas que emprenden. Una y otra vez partir de cero; intentar; aprender e iniciar la búsqueda de una nueva oportunidad sin decaer.
Este es el espíritu que impulsa a Loretxu García, chilena-española, periodista de profesión, dedicada a la arquitectura bioclimática y la construcción sustentable.
Su innovadora propuesta comenzó con la creación de paneles constructivos, que contienen un biopolímero que lleva dentro un fluido. Se trata de agua y algunos compuestos. Así, estas estructuras de madera y agua permiten optimizar la climatización de los hogares. Este sistema constructivo es amigable con el medio ambiente. Le llamaron la Casa de Agua.
“Emprendo desde que tengo 18 años. Pero mi último emprendimiento es una startup de la industria de la construcción. Se llama NIDO. Y nace de mi embarazo, literalmente. Embarazada y sufriendo calor y frío dentro de mi propia casa, pensando en lo cómoda que estaba mi hija en mi vientre, rodeada de agua, es que decido avanzar en la idea de utilizar liquido como material de construcción para controlar mejor la temperatura interior de los inmuebles”, explica Loretxu, quien hoy es parte de la iniciativa Ellas Transforman Construcción de Corfo.
¿Qué busca solucionar? ¿Cuál es principal propósito de este innovador sistema?
Con NIDO buscamos aumentar el confort térmico dentro de los inmuebles, democratizando lo que es sentirse fresco y calentito dentro de nuestras propias casas. Asimismo, queremos rebajar ese costo de climatización, que no solo supone el 70% del consumo de una vivienda, sino que el costo que supone para el planeta, las emisiones que provocamos cada vez que prendemos el aire acondicionado o las estufas.
¿Qué apoyos han recibido? ¿Cuáles han sido los principales desafíos?
El primer apoyo fue de Corfo Innova, a través de un fondo para desarrollar prototipos tecnológicos y validar el producto. Un apoyo indispensable fue la Academia de Innovación de Her Global Impact, donde aprendí a darle forma al proyecto. Gracias a la Aceleradora tecnológica de Mujeres Empresarias, aceleré la startup y finalmente gracias a ProChile de la Región Metropolitana tuve la oportunidad de presentar los paneles de agua NIDO en la Smart City de Barcelona.
¿Qué impacto ha tenido el liderazgo femenino en esta experiencia?
Creo que lo que más impacta es la diversidad en un equipo y en concreto, dirigir una empresa, siendo mujer, en el rubro de la construcción trae sus beneficios porque tienes una perspectiva diferente que te ayuda a identificar otras prioridades. Para mí, la vivienda, la casa, es nuestro refugio, nuestro NIDO, y es donde nos tenemos que sentir mejor que en cualquier lugar.
¿En qué etapa está hoy la empresa?
Ya terminamos la fase de prototipaje y de fabricabilidad, está patentado y en agosto comenzamos a producir los paneles NIDO para su comercialización.
¿Cómo imaginan lo que viene? ¿Cuál es su visión?
El próximo desafío es formar un tremendo equipo de I+D. Porque NIDO es un proyecto 360, no es una productora de paneles, sino que somos una empresa de innovación para desarrollar más productos y materiales para crear la Casa NIDO. La casa NIDO será un producto sostenible, donde desde la estructura hasta la ventilación de la casa estará basada en soluciones inspiradas en la naturaleza para rebajar el impacto en el medio ambiente.