Por Víctor Valech Yarur, gerente general de BUILDTEK.
Cautelosos, pero optimistas. Así se han expresado las voces autorizadas en materia minera. La vacunación avanza exitosamente poniendo freno a la pandemia de forma paulatina y propiciando las condiciones para que el país se levante, con proyecciones que indican que, para este año, la producción de cobre ascenderá a 5,99 millones de toneladas, 3% más que en 2020.
Otra buena noticia es el crecimiento de las cifras de empleo en esta área, con un aumento de 7,6% en comparación al año pasado. Avances que, sin duda, repercuten en la economía de nuestro país, atrayendo nuevas inversiones, generando oportunidades laborales y aportando recursos esenciales al Estado.
Como participantes activos de este mercado, una y otra vez confirmamos lo importante que es esta industria para el desarrollo del país. En la etapa de post-pandemia que comenzaremos a vivir prontamente, ojalá, es bueno ser conscientes de nuestro ADN como país minero, reconocido mundialmente así no sólo por ser el primer productor de cobre, sino también por la existencia de otros recursos minerales metálicos y no metálicos en nuestro territorio. Molibdeno, oro, plata, litio y cloruro de sodio son algunos ejemplos, con el cobre liderando -incluso- en plena crisis sanitaria.
Respecto al precio del metal rojo, solo buenas noticias. Las proyecciones de los expertos lo sitúan en el rango de 3,00 a 4,00 US$/lb, con exportaciones mineras que se estima alcancen un monto de 42 mil millones de dólares. Organizaciones como Cochilco señalan que el precio de la libra de cobre seguirá creciendo gracias a la caída del dólar estadounidense (se abaratan los costos para los consumidores chinos), a los avances científicos que han permitido la creación de vacunas contra el coronavirus y a la recuperación de la economía china que demanda cada vez más este mineral. Esta es sin duda, la confirmación de que el 2021 será un buen año, luego de un complejo 2020.
El optimismo de la minería también se ve reflejado en otros commodities y nos hace pensar en un año lleno de oportunidades. Firmas especializadas como Moody’s Investors Service publicó un informe con buenos números para las industrias de oil & gas, metales y pulpa en América Latina, sobre todo para las industrias vinculadas a la demanda de los países de Oriente. Asimismo, también se ve positivamente la recuperación de los metales básicos en la región, como en el caso de Perú, que para este año espera el inicio de la construcción de siete proyectos mineros, con una inversión de US$3.577 millones.
Si el 2020 fue el año de la gran crisis económica en el continente, este 2021 promete el repunte que como país y región necesitamos. Creemos que, en este escenario, el desarrollo de los negocios continuará materializándose en la medida que seamos capaces de mantener la pandemia bajo control; un reto que los proveedores de la minería debemos tomar como desafío propio en todos los ámbitos que nos competen.
